CARACAS - La violencia no pierde vigencia en el territorio venezolano, donde los enfrentamientos siguen a la orden del día, con una saldo de 25 lesionados el fin de semana pasado después de enfrentamientos entre opositores y fuerzas de seguridad en Caracas, mayormente al este de la ciudad, en Altamira, aunque ninguno de ellos por bala.
En la percepción del presidente Nicolás Maduro "la locura fascista se va apagando" haciendo referencia a la disminución de distritos en los cuales hubo protestas, pasado de 18 a sólo seis, sin embargo, prometió al extinto comandante Hugo Chávez que "usaría su mano de hierro para defender al pueblo" ante casi 1000 ancianos que se dieron cita al exterior del Palacio de Miraflores para dar apoyo al mandatario.
Maduro invitó a distintos sectores de la política del país a un diálogo para la búsqueda de acuerdos, mismo que se llevará a cabo el próximo miércoles en el Palacio de Miraflores" al la que también estarán invitados empresarios y llevará por nombre "Conferencia de Paz".
El presidente venezolano, como lo ha venido haciendo por las últimas semanas, señaló que las protestas que se han venido dando en diversos territorios venezolanos son intentos por justificar una intervención de orden militar por parte de los Estados Unidos, usando "la simulación" para estimular "el odio y el fascismo" con motivo de que haya un Golpe de Estado en Venezuela o una agresión directa contra el mismo Maduro.
“Yo me voy a cuidar, voy a vivir para ver hecho realidad el sueño del comandante Hugo Chávez y de nuestros libertadores”, finalizó.
Redacción La Cronica
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